¿Estás pensando en ampliar el baño? ¿Los muebles del salón ya no te gustan y deseas cambiarlos? Quizás estas frases están pasando ahora por tu cabeza, pero te preocupa el costo que puede suponer realizar unos cambios en casa.
La situación económica actual no ayuda a tener un gasto extra a final de mes, pero gracias a las facilidades que ofrecen las entidades financieras, esto ahora no será un problema.
Para hacer frente a nuevos imprevistos, una alternativa consiste en solicitar un préstamo rápido online. Con esta nueva modalidad de crédito se puede conseguir capital de forma sencilla y fácil. Para aquellos que se decidan finalmente a buscar en internet una línea de crédito, lo más recomendable es analizar las distintas opciones en el comparador de préstamos Préstamo Justo.
Las facilidades que ofrece un comparador como este son innumerables. Se pueden observar las condiciones que brindan las entidades financieras a los usuarios, pudiendo analizar los tipos de interés y comisiones de cada uno de ellas. Es una forma muy visual y práctica de conocer cuál es la mejor opción de financiación para cada tipo de persona y situación económica.
Consejos para solicitar un préstamo rápido
Para conseguir un crédito de forma segura y no perjudicar a la persona que lo solicita, es aconsejable tener en cuenta algunos detalles fundamentales. A continuación, se enumeran los más importantes:
- Solicitar solo el dinero estrictamente necesario. Todo el dinero que se pida en un primer momento después se devolverá junto con los intereses y gastos añadidos.
- Puede resultar muy tentador solicitar más dinero del necesario, pero al final ese exceso se debe pagar. Analizar previamente la salud financiera del solicitante es un paso esencial en este proceso.
- Vigilar el TAE. La Tasa Anual Equivalente (TAE) será un indicativo del costo o rendimiento efectivo anual de un producto financiero. Aquí se engloban todas las comisiones, intereses y gastos que conlleva la aceptación del préstamo. Cuanto menor sea su porcentaje, más rentable será para el prestatario. Por ello, es necesario comparar las distintas propuestas de crédito.
- Pagar las mensualidades en la fecha establecida. Cuando finalmente se ha solicitado el dinero rápido, en el contrato queda indicada la fecha en la que se harán los pagos de devolución.
- Si se produce un retraso en el abono del mismo, la entidad bancaria podrá sancionar con un sobrecoste económico, los temidos intereses por demora. Lo ideal en estos casos es establecer una fecha cómoda para el prestatario en la que se garantice que el pago será realizado.
- Amortizar el préstamo a la mayor brevedad posible. Este aspecto no debe pasar desapercibido, ya que juega un papel fundamental en la devolución del capital financiado. Cuanto más tiempo se tarde en abonar la deuda, más intereses se pagarán. Es preferible elegir menos mensualidades con un mayor importe y, así disminuir los gastos que conllevan los intereses.
- Consultar la cláusula de cancelación. Si se puede cancelar el crédito antes de la fecha fijada gracias a un ingreso imprevisto o una paga extra como el aguinaldo, es fundamental comprobar previamente que esto no supondrá una penalización o un gasto añadido.