Andrea Legarreta se sinceró con la prensa sobre el difícil momento que atraviesa tras la muerte de su madre, la señora Isabel Martínez, quien perdió la vida el pasado domingo 30 de julio en su casa de Acapulco.
“Ya llevaba un rato batallando, tenía fibromialgia, y el medicamento de la fibromialgia le quitaba el dolor, pero le generaba nauseas, entonces luego empezó a comer poco, tenía una delgadez muy marcada porque a parte había sido operada en dos ocasiones, tuvo divertículos, le quitaron parte del intestino, pero eso fue hace años, simplemente fueron cosas que se fueron sumando”.
La conductora del matutino de Televisa reveló que previo a su aniversario de vida, celebrado el pasado 12 de julio, hubo una situación que la hizo presentir que se acercaba el deceso de la mujer que le dio la vida.
“Cuando fue mi cumpleaños, dos días antes, (mi mamá) tenía mucho malestar, tuvo una oclusión intestinal, y esto no lo he compartido, pero cuando yo me despedí de ella, antes de que se cerrara la puerta, lo último que vi fue su carita, y su mirada, no sé si era su mirada o su alma a través de sus ojos, me hizo saber que ya no la iba a ver… mis hijas también lo sintieron”, contó conmovida.
Posteriormente, Andrea desveló que Nina Rubín Legarreta, pudo estar presente en la íntima despedida que tanto ella, como su padre y hermanos, le dieron a su mamá.
“Mi hermano me localizó, nos fuimos a Acapulco, mi Ninita que estaba en casa me acompañó y ella vivió esa parte, vio a su abuela sin vida, vio como todos nosotros le pusimos música, la maquillé, porque ella era muy coqueta, le puse su perfumito que tanto le gustaba, le leímos la tarjeta que mi papá le escribió, que ya no pudo ver”, relató.
Finalmente, Legarreta confesó que por el momento no piensa volver al musical Timbiriche Vaselina, pues su personaje representa todas las emociones que por el momento no puede externar.
“Mía ayer tuvo la fortaleza para irse al show de Cumbia Machine [Tour] … [yo] no sé todavía, mi personaje Frenchy [en Vaselina] es muy alegre, muy juguetona, muy bromista, y muy sonriente, no sé, quizás si regrese, mi papi hay momentos que llora como niño… y aún así es un hombre muy fuerte, me dijo ‘mamita, tenemos que seguir adelante porque a tu mamá no le va a gustar ni que yo me quede en mi casa, en mi recámara sentado, ni que tú y tus hermanos se queden sin continuar luchando por la felicidad, por nuestros sueños”, culminó.