Este tipo de expresión artística, explicó el alumno, se puede ver en diferentes ciudades del mundo y es más recurrente que se haga con gises, por lo que se le considera arte callejero o efímero.
«En este caso se utilizaron las canchas de futbol rápido de la Facultad como lienzo, que cuentan con una dimensión de 25 x 12 metros y fue hecha en acrílico», comentó.
Puso de manifiesto que el propósito de la elaboración es promocionar el taller que él dicta dentro de la propia Facultad: «al finalizar el curso, se tiene planeado que los alumnos elaboren una obra con esta misma técnica en la Explanada de Rectoría».
Chávez Salinas dijo que el curso comenzó hace dos semanas, es cada sábado, y van a ser ocho sesiones y al final de éste se piensa hacer un Madonnari más tradicional con gis pastel frente a Rectoría, junto con los alumnos.
Explicó que la obra «Indulgencia» es una crítica a la religión, ridiculiza a un par de demonios que trepan desde el infierno tratando de avanzar hacia la salvación en el cielo; en su intento desesperado utilizan decenas de globos para subir que, a su vez, simbolizan la paradoja de que el cielo es un estado de conciencia imposible de alcanzar por medio de objetos como éstos.
Chávez Salinas señaló que dentro de sus proyectos para este tipo de expresión está la creación de un festival y un concurso internacional de Arte Madonnari, además de llevar esta expresión a varias partes del estado de Querétaro.
Este tipo de expresión artística, explicó el alumno, se puede ver en diferentes ciudades del mundo y es más recurrente que se haga con gises, por lo que se le considera arte callejero o efímero.
«En este caso se utilizaron las canchas de futbol rápido de la Facultad como lienzo, que cuentan con una dimensión de 25 x 12 metros y fue hecha en acrílico», comentó.
Puso de manifiesto que el propósito de la elaboración es promocionar el taller que él dicta dentro de la propia Facultad: «al finalizar el curso, se tiene planeado que los alumnos elaboren una obra con esta misma técnica en la Explanada de Rectoría».
Chávez Salinas dijo que el curso comenzó hace dos semanas, es cada sábado, y van a ser ocho sesiones y al final de éste se piensa hacer un Madonnari más tradicional con gis pastel frente a Rectoría, junto con los alumnos.
Explicó que la obra «Indulgencia» es una crítica a la religión, ridiculiza a un par de demonios que trepan desde el infierno tratando de avanzar hacia la salvación en el cielo; en su intento desesperado utilizan decenas de globos para subir que, a su vez, simbolizan la paradoja de que el cielo es un estado de conciencia imposible de alcanzar por medio de objetos como éstos.
Chávez Salinas señaló que dentro de sus proyectos para este tipo de expresión está la creación de un festival y un concurso internacional de Arte Madonnari, además de llevar esta expresión a varias partes del estado de Querétaro.