El discurso inaugural de Donald Trump el 20 de enero fue interpretado por algunos medios de comunicación de China, como el Global Times, como una alta posibilidad de fricciones comerciales.
Con la posibilidad existente de que EU imponga un arancel de 45% a las importaciones chinas, el panorama para analistas comerciales no es alentador.
Para los chinos, las empresas productoras de electrónicos, consumo, ropa y electrodomésticos serían los más afectados al negociar en un ambiente de disputas, debido a su gran exposición en Norteamérica, según Reto Hess, jefe de investigación de renta variable global de Credit Suisse.
Compañías como la tecnológica GoerTek Inc y el fabricante de ropa Regina Milagro Internacional Holdings ganan más del 70% de sus ingresos en Estados Unidos, según Morgan Stanley.
Gráficos de Bloomberg muestran que además de Goer Tek y Regina Miracle, otras compañías como Li & Fung, WH Group y Lens Technologu obtienen el 60% o más de sus ingresos en EU.
Pero más afectadas aún podrían ser algunas compañías estadounidenses que tienen gran presencia en China.
Analistas consideran que en un ambiente de tensión comercial, los consumidores de dicho país podrían boicotear a las marcas estadounidenses, como lo hicieron con las firmas japonesas en 2012 tras una contienda territorial, por lo que los productores domésticos locales como BYD Co. Y Anta Sports Waer podrían ser los beneficiados.
Además, otras marcas foráneas no estadounidenses también se verían beneficiadas de tales medidas. “Los consumidores chinos podrían decidirse a comprar un auto alemán sobre un estadounidenses, o comprar una camiseta Adidas en lugar de una Nike”, opinó Hess.
Marcas como Ambarella, Texas Instruments, Marvell, Genco Shipping & Trading y Diana Shiping tienen desde el 50 hasta el 90% de sus ventas en China.
Al menos 10 por ciento de las compañías estadounidenses en el índice MSCI tienen cerca de la décima parte de sus ventas en China, mientras que únicamente el 2% de las firmas chinas generan la mayoría de sus ingresos en EU, según Morgan Stanley.