Guadalajara, 8 Dic (Notimex).- Alrededor del 10 por ciento de la población mexicana presenta apnea del sueño, que se caracteriza por la suspensión de la respiración durante un pequeño lapso mientras se duerme, afirmó la especialista María Ivette Muciño Hernández.
Destacó que la obesidad está relacionada con el Síndrome de Apnea Hipoapnea Obstructiva del Sueño (SAHOS) y México tiene el primer lugar en población con sobrepeso y complicaciones cardiovasculares en el mundo.
Muciño Hernández, coordinadora del módulo de Otorrinolaringología, del vigésimo primer Congreso Internacional Avances en Medicina (CIAM), del Hospital Civil de Guadalajara (HCG), afirmó que por 10 por ciento de sobrepeso que presente una persona, incrementa seis veces más el riesgo de tener SAHOS.
Asimismo, agregó, los problemas cardiovasculares aumentan dos o tres veces el riesgo de padecerlo en caso de obesidad.
Explicó que hay casos severos en los que el paciente deja de respirar por lapsos más prolongados; pese a este síntoma, cuatro de cada cinco personas que lo presentan a ese nivel no están enterados de su padecimiento.
Entre los síntomas del síndrome se encuentran somnolencia diurna; deterioro cognitivo; alteración de la memoria; cambios de personalidad; ronquido intenso y alertamientos o microdespertares.
Muciño Hernández apuntó que la enfermedad se presenta en adultos y niños; en estos últimos casos, si presentan el síndrome lo más probable es que lo tengan toda su vida. Por ello, resaltó la importancia de prevenir la obesidad mediante actividad física y alimentación balanceada.
“Al paciente con SAHOS se le puede operar o ayudar con una máquina de presión positiva para que respire con mayor facilidad, pero si no baja de peso no hay buena respuesta”, subrayó.
En tanto que el también coordinador del módulo, Raúl Durán López, dijo que hay una subestimación del SAHOS, ya que 80 por ciento de los casos, en el grado de moderado a severo no se llegan a diagnosticar.
Aclaró que roncar no tiene una relación estrecha con la apnea en todos los casos, y cuando es así, se trata de ronquidos intensos, con espacios en que la persona deja de respirar.