Territorios Palestinos, 20 Ene 2024.- El ejército israelí sigue librando encarnizados combates en Gaza, donde Hamás afirma que murieron casi 25.000 personas desde el inicio de la guerra, cuyas tensiones derivadas en la región escalaron en Siria con la muerte de cuatro iraníes en un ataque atribuido a Israel.
«Cuatro consejeros militares» murieron en un ataque israelí en Damasco, anunciaron los Guardianes de la Revolución, el ejército ideológico de Irán. Según la agencia iraní Mehr, entre las víctimas estaba el jefe de inteligencia para Siria de los Guardianes.
Un corresponsal de la AFP informó de disparos de artillería y bombardeos en el sur de la Franja, especialmente el sector de Jan Yunis, epicentro de las operaciones militares.
Las tropas israelíes destruyen «infraestructuras terroristas» en toda la franja costera y golpearon lanzaderas de cohetes en Jan Yunis, según el ejército.
El sábado, el Ministerio de Salud de Hamás, que controla Gaza, anunció que los «ataques» israelíes habían causado al menos 165 muertos en las últimas 24 horas.
Según esta fuente, las operaciones israelíes en Gaza dejaron 24.927 muertos, en su mayoría mujeres y menores de edad, y más de 62.000 personas heridas.
El conflicto comenzó el 7 de octubre con un ataque sin precedentes contra el territorio israelí de este grupo islamista, catalogado como «terrorista» por parte de Estados Unidos y la Unión Europea.
Los milicianos de Hamás mataron a 1.140 personas, mayoritariamente civiles, según un recuento de la AFP en base al balance oficial israelí, y secuestraron a otras 250 de las que un centenar fueron liberadas durante una tregua en noviembre.
Conflagración regional
Además de su operación militar, Israel mantiene desde el 9 de octubre un «asedio completo» a Gaza y ejerce un bloqueo prácticamente total de la entrada de agua, alimentos, medicamentos y combustible.
La Organización Mundial de la Salud lamentó las «condiciones de vida inhumanas» para los 2,4 millones de habitantes de este territorio arrasado. Casi 20.000 bebés nacieron en «un infierno» en Gaza desde el inicio de la ofensiva israelí, según Unicef.
El conflicto en Gaza también agrava las tensiones entre Israel y los grupos armados en la región respaldados por Irán, como el Hezbolá libanés o los hutíes de Yemen.
El sábado, los Guardianes de la Revolución iraníes anunciaron la muerte de «cuatro asesores militares» en un «ataque aéreo llevado a cabo por los aviones de combate» israelíes que destruyó un edificio residencial en Damasco.
La agencia iraní Mehr afirmó que murieron el jefe de inteligencia para Siria de los Guardianes, su adjunto «y otros dos miembros de esta fuerza».
El ejército israelí, contactado por la AFP no quiso comentar las informaciones.
En Yemen, Estados Unidos volvió a bombardear posiciones de los rebeldes hutíes el viernes después de que estos reivindicaran un ataque contra un petrolero estadounidense en el golfo de Adén.
Y en la frontera israelí-libanesa, otro punto caliente, el ejército israelí bombardeó emplazamientos de Hezbolá en el sur del Líbano, después de que el movimiento islamista atacara a Israel.
Choque Biden-Netanyahu
Estados Unidos, principal aliado de Israel y apoyo clave en esta guerra contra Hamás, pidió en las últimas semanas reducir las víctimas civiles en Gaza y defendió la creación de un Estado palestino como garantía de seguridad regional.
Sin embargo, Netanyahu afirmó que Israel debe «tener el control de la seguridad de todo el territorio al oeste del río Jordán», lo que «contradice la idea» de un Estado palestino.
El primer ministro habló por teléfono el viernes con el presidente estadounidense, Joe Biden, sobre la viabilidad de esta solución de «dos Estados».
Tras la conversación, la primera en casi un mes, Biden «cree todavía en la perspectiva y la posibilidad» de un Estado palestino, pero «reconoce que hará falta mucho trabajo para llegar allí», indicó la Casa Blanca.
«La ilusión que predica Biden a favor de un Estado de Palestina (….) no engaña a nuestro pueblo», reaccionó el sábado en un comunicado Izzat al Richiq, miembro del buró político de Hamás.
El jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Josep Borrell, sostuvo el viernes que la solución «de dos Estados debe ser impuesta desde el exterior para traer la paz» y acusó a Netanyahu de estar «boicoteando» esta vía.
«Para impedirla, han llegado ellos mismos a crear Hamás. Hamás ha sido financiado por el gobierno de Israel para intentar debilitar a la Autoridad Palestina de Fatah», afirmó.