Madrid, 17 Sep (redacción).- Al constatar que “no existe un candidato que cuente con los apoyos necesarios para que el Congreso de los Diputados, en su caso, le otorgue su confianza”, el rey de España Felipe VI descartó hacer una propuesta de candidato a la presidencia del gobierno español.
La Casa del Rey emitió un comunicado en el que indicó que Felipe VI concluyó las consultas, establecidas en el artículo 99 de la Constitución, las cuales se realizaron los días 16 y 17 de septiembre con los representantes partidistas.
Los cuatro principales grupos parlamentarios son: Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Partido Popular (PP), Ciudadanos y Unidas Podemos (UP).
Tras confirmar la postura de los congresistas, el monarca comunicó a la presidenta del Congreso, Meritxell Batet Lamaña, que no formulará una propuesta de candidato a la presidencia del gobierno. “Todo ello a los efectos de lo previsto en el artículo 99 de la Constitución”.
No obstante, dicho artículo deja abierta la posibilidad, toda vez que el plazo para la investidura presidencial concluye hasta las 12 de la noche del 23 de septiembre. En los incisos 3 y 4 del artículo 99 establece que, si por mayoría de los congresistas, se da el voto de confianza al candidato, el rey nombrará presidente.
En caso contrario, la propuesta será nuevamente votada 48 horas posteriores y, si nuevamente no se obtiene el aval para la investidura “se tramitarán sucesivas propuestas en la forma prevista en los apartados anteriores”, de acuerdo a un despacho informativo del diario El País.
En el punto 5 del artículo se precisa que dos meses después de la primera votación de investidura si “ningún candidato hubiere obtenido la confianza del Congreso, el rey disolverá ambas cámaras y convocará nuevas elecciones con el refrendo del presidente del Congreso”.
El sitio digital elpais.com añadió que las fuerzas políticas tendrían entre el miércoles y jueves para llegar a acuerdos e informar a Felipe VI que el candidato tiene el respaldo del Congreso, después habría un debate de investidura entre el 20 y el 23 de septiembre.
De esa manera, el sábado 21, en la primera votación el candidato deberá lograr la mayoría a su favor y en caso de no alcanzarla solo le quedarían 48 horas para sumar apoyo.
De no alcanzar el acuerdo, a las cero horas del 23 de septiembre quedaría disuelta la XIII Legislatura, y sería la segunda ocasión en tres años en la que el monarca convoque a elecciones. Este proceso deberá celebrarse 47 días posteriores a que se conozca la eliminación de las Cortes y la convocatoria electoral.