Alertan sobre posibles ataques terroristas en toma de protesta de Trump
Los cuerpos policiales de Estados Unidos se están enfocando en el potencial de ataques terroristas por parte de “lobos solitarios” durante la inauguración presidencial y otros eventos asociados, entre los cuales está la posibilidad de que agresores intenten usar vehículos para embestir a multitudes, dijo Jeh Johnson, secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos.
«Tenemos que preocuparnos sobre actos individuales de extremismo violento y de aquellos que se radicalizan por sí mismos», dijo el viernes Johnson a periodistas en un centro de seguridad en los suburbios de Washington que servirá como sede para que más de 40 agencias federales, estatales y locales coordinen sus esfuerzos para la inauguración. «Estaremos atentos a esas amenazas».
Hasta la fecha, no hay una amenaza específica o creíble contra la inauguración u otros eventos relacionados, los que comenzarán el 19 de enero y se extenderán hasta el 21 de enero, dijo Johnson. La ceremonia oficial en la cual Donald Trump prestará juramento como presidente será el 20 de enero.
La inauguración presidencial de Estados Unidos es generalmente uno de los eventos más vigilados en el mundo, pero la naturaleza abierta del evento –el presidente electo y su familia a menudo se bajan de su auto blindado para caminar a lo largo de la Avenida Pensilvania para que sus simpatizantes puedan verlos con mayor facilidad– es algo que complica esos esfuerzos.
Público estimado
Johnson dijo que las fuerzas del orden esperan que asistan entre 700 mil y 900 mil personas, mientras que alrededor de 100 organizaciones diferentes tienen planes de realizar manifestaciones ya sea a favor o en contra de Trump, dijo Johnson. Esa cifra es alrededor de la mitad de las 1.8 millones de personas que se estima asistieron a la primera inauguración del presidente Barack Obama en 2009.
Trump apunta a una cifra aún mayor. En un tuit de diciembre, escribió, “Bueno, lo hicimos ¡juntos! espero que los seguidores del ‘MOVEMENT’ vayan a Washington el 20 de diciembre para el juramento. ¡Establezcamos el récord histórico!”
Con el objeto de asegurar la seguridad para ese tipo de multitudes, alrededor de 28 mil serán personas dedicadas a la seguridad, desde agencias que incluyen el Departamento de Seguridad Nacional, el FBI, la policía del Capitolio de Estados Unidos, la policía de los parques de Estados Unidos y la policía local, dijo Johnson.
El uso de camiones como armas en ataques terroristas ha aumentado en el mundo, incluso aparecen en un manual de al Qaeda. Han habido 157 asaltos de ese tipo desde 1970 hasta el 2015, y casi la mitad de ellos se ha registrado desde 2014, muchos de ellos en Cisjordania y la Franja de Gaza, según la base de datos de terrorismo global de la Universidad de Maryland.
Un terrorista lobo solitario mató en diciembre a 12 personas en Alemania después de irrumpir con su camión contra un mercado navideño. Más tarde el terrorista murió tras enfrentarse a la policía en Italia. Un ataque similar en Niza, Francia, en julio del año pasado mató a más de 80 personas antes de que se diera muerte al conductor.
En respuesta, las agencias de seguridad de Estados Unidos tienen planes de fortificar los perímetros de lugares alrededor de los eventos de inauguración con camiones volteadores, camiones que transportan cemento y autobuses, dijo Johnson. «Esa es una precaución que estamos adoptando especialmente para esta inauguración», dijo Johnson.
Johnson señaló que el ambiente de terrorismo es muy diferente que al de sólo tres años atrás considerando los recientes ataques en Europa. El foco central de la seguridad de la inauguración será asegurar que los eventos oficiales no sean perturbados, como la procesión de la caravana presidencial hasta el Capitolio y su regreso, indicó Johnson.
Alrededor de 65 grupos planean realizar demostraciones el 20 de enero cuando Trump sea juramentado. «Siempre que se reúne una cantidad tan grande de personas –y con tal cantidad de grupos que tienen intenciones de realizar demostraciones y ejercer sus derechos garantizados en la Primera Enmienda— tenemos que estar vigilantes, tenemos que planear y tenemos que prepararnos», dijo Johnson.
