Beijing, 22 Sep (redacción/El Pueblo en Línea) – “Dos bombas, Un satélite”, el proyecto nuclear-espacial que se refiere a la bomba atómica, la bomba de hidrógeno y el satélite artificial, estableció a China como un gran país.
La teoría china “facies terrestres de petróleo” confirmó la existencia de petróleo nacional. Asimismo, el arroz híbrido garantiza la alimentación de casi 1.400 millones de personas, los vuelos espaciales tripulados cumplieron un sueño milenario y los ferrocarriles de alta velocidad, la comunicación 5G y la supercomputación marcan la velocidad de China.
Desde la fundación de la República Popular China hace 70 años, generaciones de científicos y tecnólogos han trabajado de forma incansable para lograr notables logros, uno tras otro. Hoy en día, China se ha convertido en un gran país en el área innovación tecnológica de relevante influencia internacional, y está dando grandes pasos hacia el objetivo de escalar al poder tecnológico mundial.
Desde el llamamiento de “marchar con las ciencias” hasta el inicio de “la primavera de las ciencias” y desde “la ciencia y la tecnología son las fuerzas productivas primarias” hasta la implementación completa de la estrategia de desarrollo impulsada por la innovación que enuncia que “la innovación es lo primero en liderar el desarrollo”, China otorga gran importancia a la innovación científica y tecnológica.
En este sentido, el país siempre se adhiere al camino de la innovación propia con características chinas y conforme a las leyes de innovación científicas y tecnológicas. En los últimos años, el apoyo y las reformas del sistema científico y tecnológico de China han avanzado con pasos rápidos y firmes: las capacidades de innovación siguen creciendo y su liderazgo ha mejorado con creces. La contribución de China en ciencia y tecnología a la innovación mundial ha aumentado ostensiblemente, convirtiéndose en un polo cada vez más importante dentro del panorama global de la innovación.